jueves, 18 de diciembre de 2014

Outfit: el Yeti

Holaaaaaaaaa! Ya sé que hace mucho que no publico nada sobre ropa o fotos, pero es que ando muy liada y bastante desganada, para qué mentir. Pero bueno, aquí tenéis algo poco usual pero muy gracioso en mi opinión ;)
Suelo ir a Formigal en invierno y hace un par de semanas Eneku vino conmigo. Total, que entre nieve y 7 grados bajo cero, nos quedaron unas fotos chulísimas! El abrigo es de una tienda que ya cerró, de Donosti, se llamaba Naiara, Las botas (JAJAJAJAJAJA) son de una marca llamada Moon Boot, muy famosa en botas de apres ski o botas de nieve. Son de mi madre, pero es que las adoro, así que, como me pareció muy gracioso sacar fotos así vestida cual Yeti, aquí están,! Espero que os gusten :)



Hi guys! I know it's been a long time since I last uploades pics of clothes and so on and so forth, but I'm really busy. But whatever, here you have something a bit unusual but very funny I think ;)
I usually go to Formigal in winter and a couple of weeks ago my friend Eneku came with me. In the end, in between snow and 7º Centigrade below zero, we took beautiful photographs! The coat is from a shop in San Sebastian which is now closed,  called Naiara. The boots' (hahahahaha) brand is Moon Boot, which is really common in snow boots. They're my mum's but I love them so as I thought they were very funny I went to take photos like Big Foot. So, here they are! Hope you like them :)


miércoles, 17 de diciembre de 2014

16/12/14.

Anoche quise verte a pesar de todo. Me convertí en viento sur y volé por toda la cuidad hasta tu ventana. Por suerte estaba abierta, y me colé en tu cuarto como una corriente que movió los papeles de encima de tu escritorio desordenado. Me pausé encima de tus libros y te miré. Estabas desnuda, mirabas la luna apagada a través de los fríos cristales. De repente te giraste hacia mí, como si advirtieras mi presencia, y pude ver tus ojos negros. Estaban llenos de amargas lágrimas. Corrí a rodearte con mi calidez y mi calma, pero entonces, al sentirme, escuché a tu corazón quebrarse en trece mil pedazos. Te doblaste, encorvando tu delicada espina dorsal mientras el pelo te caía a chorros, y escupiste el agua por los ojos con tanta rabia que te golpeó la cara, enrojeciéndote las mejillas. No supe qué hacer, y me quedé allí, inmóvil, viéndote llorar, abrazándote en forma de aire pegado a tu cintura, mirando cómo se te hinchaban de golpe los pulmones con cada sollozo. Minutos, tal vez horas. Quién sabe. Tiempo después cerraste la ventana, dejándome atrapado allí, pero no me importó: allí era donde yo quería estar, junto a ti, consolándote, rozando tu inmaculada piel con mis dedos invisibles, acariciando tus oídos y susurrándote las palabras prohibidas. En aquel momento, la eternidad se me antojó corta a tu lado.

viernes, 7 de noviembre de 2014

Tres

Hola chicos! Hacía mucho que no subía fotos, y hoy he estado con Eneku y Silvia, así que... las fotos también entran en el paquete. Están hechas en casa de Silvi, en plan locurón, en pijama, con flash y delante de unas cortinas. No tienen nada, pero tienen mucho; en mi opinión expresan realmente bien nuestra relación. Los tres juntos somos diversión. Somos juegos. Somos alegría. Somos familia. Somos amistad, creatividad, somos un torbellino de ideas geniales que, al combinarlas, siempre nos aportan buenos resultados. Como podréis ver, son fotos totalmente normales, pero transmiten felicidad, ¿no os parece? Bueno, es que eso soy yo cuando nos juntamos los tres: felicidad pura y dura.



domingo, 12 de octubre de 2014

Agua

No entiendo cómo hay gente que no ama la lluvia, cuando las nubes lloran, cuando el cielo se humaniza y se rinde ante la tormenta. Es magia. Como hoy, por ejemplo.

Me he levantado con resaca y parece que le he dado pena al firmamento, ya que se ha vestido con su cara más gris para acompañarme hasta casa por las calles de este infesto lugar. Cuando tan solo había recorrido 100 metros ya echaba de menos las sábanas impregnadas con tu olor revueltas sobre la cama, rodeándome el cuerpo desnudo. Mi piel se estremecía en la noche al ritmo de tu respiración, mansa, tranquila, dándose por vencida ante mí como un perro sumiso. Es curioso lo fuerte que puedo llegar a parecer y lo rota que realmente estoy. Pero al amanecer, cuando te has dormido tras una de esas noches que se tatúan en la mente, me he calzado mis botas de tacón y me he puesto tu camisa favorita encima de mi sujetador de encaje para llevarme un pedacito de ti y tener una excusa para volver a verte. He ido a mear, y, cuando me he puesto la chaqueta con intención de largarme de tu lado para verte suplicarme que vuelva, me he girado y te he visto dormir. Te he contemplado casi veinte minutos hasta que he comprendido lo ridículo de la situación, te he dado un beso en los labios y me he marchado de lo que posiblemente sea lo más cercano a un hogar que he tenido en toda mi vida, y al son de tu puerta cerrándose mis ojos se han llenado de agua.


Mientras caminaba sonoramente hacia mi casa el cielo se ha puesto a llorar. Se ve que le ha dado lástima mi alma solitaria vagando por callejones donde el frío de la mañana se estancaba y se colaba en mis entrañas haciéndome tiritar. A cada paso me sentía más vacía. Me he llevado los puños de tu camisa a la cara y te he olido a ti mientras tu carita se aparecía ante mis ojos, de maquillaje corrido y más negros de lo habitual. Tu sonrisa me ha cortado los labios y los ha hecho sangrar. Por suerte la lluvia estaba ahí para limpiarlos, y para limpiarme a mí entera. No entiendo por qué hago siempre lo mismo y me alejo de lo que realmente tendría que mantener cerca. En lugar de eso, soy una imbécil que huye de la luz para andar hasta casa únicamente acompañada del olor a humedad que desciende del cielo matutino. Soy esa que, cada vez que encuentra lo que podría llegar a traerme siquiera un ápice de felicidad, se escapa corriendo para sentarse llorando bajo el escritorio pensando que no soy merecedora de tal enorme regalo y hundirme en la mierda más pestilente. Siempre igual. 

domingo, 14 de septiembre de 2014

Desastre.

El fuerte viento solía golpear la ventana como a gritos, sollozos desgarradores en mitad de la noche, pero mudos, porque aquellas noches de verano el silencio lo cubría todo como un manto de soledad. Parecía que el mundo entero callaba, que hasta las farolas se habían apagado para contemplar con exquisito detenimiento mi alma desastrada, raída como un árbol viejo. De vez en cuando un aullido sordo brotaba de mis entrañas recordándome, fiel, que el destino no existe y que el futuro es directamente proporcional a cómo de jodida sea tu vida y cómo de hijo de puta seas tú. Y yo, como un animal a punto de comerse a sus propias crías, soltaba un suspiro mientras una ligera sonrisa torcida afloraba a mis labios.
Las peores putadas se las hace uno mismo.

jueves, 11 de septiembre de 2014

Outfit: Estrenando botas

Hola chicos! Algunos ya lo sabéis, pero para los que no: gracias a Eneku descubrí a un montón de bloggeras que me han enamorado totalmente, principalmente Dulceida. Así que un día investigando, encontré que había hecho una firma de zapatos para KrackOnline, y cuando vi las botas 'Arizona' fue amor a primera vista. Hablé con mis padres tras llegar a casa y tan solo 5 días después las tenía. Cómo no, nada más tenerlas quedé con Eneku para hacer una sesión, y bueno, aquí está!
Está hecha en unos garajes al lado de mi casa y después en un parque de mi barrio, no tiene más misterio. Por temas de sol y luz me ha costado bastante dejar las fotos bonitas, pero creo que he hecho un buen trabajo.
Personalmente me encanta este outfit, es muy sencillo y muy suelto. Últimamente estoy usando prendas muy basic y me decanto mucho por el blanco y negro sin más complicación. Creo que la blusa blanca (blanco roto casi crudo, de hecho) con el resto de la ropa en negro le da un toque genial para enmarcar un poco el cuerpo y el punto de mira.
Ya que me soléis preguntar por el maquillaje, en cada post explicaré lo que llevo. Esta vez me puse como siempre base y polvos y un poco de blush rosado. Para las sombras utilicé blanco y crudo en desde las pestañas hasta las cejas para intensificar un poco la fuerza del ojo y darle importancia al color tan oscuro de iris que tengo. Después, en el pliegue, puse sombra gris, y en la parte exterior la bajé hacia las pestañas para que la mitad del párpado móvil quedara oscurecida. Por último, con una raya en lápiz, hice una línea fina y difuminada pegada a las pestañas, para, al darme rímel posteriormente, pareciera que tuviera muchas más. Y cómo no... mi pintalabios. Es de Astor, un tono bastante oscuro que me encanta cómo queda.
A ver qué os parece! :)


Blusa: Mango
Croptop: Bershka
Falda: Bershka
Botas: KrackOnline
Collar: Stradivarious


lunes, 1 de septiembre de 2014

Outfit: This is war

Hola chicos! Bueno, este es el primer outfit que voy a enseñaros. Eneku y yo siempre vamos de fotos sin tener nada pensado (y hay que admitir que nos salen maravillas), pero ésta vez y por primera vez ya sabíamos qué ropa iba a ponerme. Un par de días antes estuvimos hablando sobre hacer una sensión con su chaqueta de camuflaje, y pensamos que si el resto de la ropa era blanca tanto la chaqueta como el pintalabios resaltarían. Y bueno, así fue.
Como podréis ver no llevaba los ojos muy marcados porque quise darles importancia a los labios, de ese color tan característico mío. Tan solo me puse algunas sombras color café para que quedase un efecto ahumado bastante natural.
El título del outfit se debe a una canción de 30 Second To Mars que me encanta, y como llevo este look de camuflaje se me ha ocurrido por el traje de los soldados.
Espero que os guste!
PD: si tenéis cualquier idea o sugerencia estaré encantada de escucharos. Podéis contactar conmigo en instagram, twitter o dejando un comentario aquí. Muchas gracias :)


     Pintalabios: KIKO
     Chaqueta: Zara Boy(Eneku)
     Camiseta: Stradivarious
     Pantalones:Bershka
     Zapatos: Converse All Star


viernes, 22 de agosto de 2014

Banderas blancas.

La luz de la luna se filtraba por aquella ventana sin cortinas y se proyectaba sobre sus labios, como los focos de un museo apuntan a su mayor obra de arte. Yo, incapaz de apartar la vista de sus caderas descubiertas, sonreía cada vez que su pecho se llenaba de aire para después vaciarse cuando soltaba un suspiro. La camiseta de tirantes gris se le ceñía al cuerpo y se arrugaba a su vez, dejando asomar tan solo una parte de su vientre como un pecado. Su piel, acariciada por el sol, se erizaba de vez en cuando a causa de la brisa marina, que me impulsaba sutilmente a tumbarme a su lado en vez de contemplarla desde una silla. Su pelo, castaño como los árboles el mes de octubre, le chorreaba por la cara mezclándose con sus pestañas; las mismas que, cuando se separaban, me enseñaban los ojos más serenos y penetrantes. Se clavaban en mí como cuchillos, desgarrándome el alma que por entonces ya estaba prendida de su olor, desmoronándome el interior y haciendo que mis rodillas flaquearan. Yo, como un guerrero que ha luchado demasiado, me rendía, y ella lo sabía. Disfrutaba de mi anhelo a cada segundo. Por eso, cada vez que se despertaba me besaba, suave, casi imperceptiblemente apoyando sus labios sobre los míos para después volver sobre el colchón y torturarme poco a poco, dejándose vencer por el sueño, enseñándome cómo la volvía a perder otra vez.

domingo, 16 de febrero de 2014

Texturas y recuerdos

Pasó la mano por la arrugada madera del puente. Le recordó a la vieja piel de su bisabuela, mientras reposaba en aquel sillón rojo y pasaba horas mirando los cuadros de la pared de enfrente.
De repente se levantó mucho viento, y no supo si las ráfagas corrían dentro o fuera de sí misma. Cerró los ojos un momento, y deseó que fuera Diciembre otra vez, para ver los copos de nieve caer desde su vera y comer galletitas con mermelada... pero al instante siguiente recordó que cuando algo o alguien muere ya no regresa nunca más. Por mucho que lo desees, ya no vuelve jamás.
Se sentó en la barandilla del puente de madera y tiró al agua unas piedras que se había guardado en los bolsillos de la parka de camino allí. Se quedó un rato con la mirada clavada en su propio reflejo que temblaba, hasta que las ondas cesaron y se extinguieron, y seguidamente se arrepintió de haber arrojado las piedrecitas al río. ¿Por qué está todo condenado a desaparecer algún día?

miércoles, 8 de enero de 2014

Sin poder aguantarlo más

Siempre con ese puto deber de ser buena chica, mientras a tu alrededor todos te ponen supuestas caras amables y vives en esa falsa fantasía de sonrisas forzadas.
Pero dicen que de todo se acaba cansando uno, y cuando al fin sales de esa caja de bombones caducados te encuentras encerrado en un mundo de incomprensión. Sin salida. Atrapada como un pajarito en su jaula de hierro cuya puerta se encuentra constantemente cerrada. Sola, perdida, ahogada en lo que creíste que sería la ansiada libertad. Respirando el putrefacto aroma de la realidad. Sorda en consecuencia de los innumerables gritos que quedan enredados en la red del silencio sin cesar. Y no amainan jamás.
Decidme, ¿es esto el mundo real? Lo siento, pero creo que prefería mi idílico paraíso en las estrellas.